tag:blogger.com,1999:blog-78424245531705144.post8605231096274260019..comments2024-03-16T13:29:46.818+01:00Comments on Pedro Larrauri. Neopolítico. Anti-corrupción. Implicado en Vigo. Crítico (para mejorar lo q va mal): Rosa Díez nos engaña: dentro de UPyD no hay separación de poderes. El caso Calvet.Pedro Larraurihttp://www.blogger.com/profile/06511348435635012893noreply@blogger.comBlogger11125tag:blogger.com,1999:blog-78424245531705144.post-4484159733562370502014-10-17T14:27:34.309+02:002014-10-17T14:27:34.309+02:00Pues el que le sigue en la lista es Enrique Calvet...Pues el que le sigue en la lista es Enrique Calvet, le corresponde substituir a Sosa Wagner :)Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-78424245531705144.post-91665829998436235122014-10-17T13:31:01.856+02:002014-10-17T13:31:01.856+02:00Los acontecimientos se precipitan.Sosa Wagner deja...Los acontecimientos se precipitan.Sosa Wagner deja UPyD tras el acoso y derribo. Primero los insultos, después la portavocía, y ahora por lo menos ha demostrado dignidad dejando el carnet y el acta de eurodiputado. Dignidad que por cierto solo tuvo Rosa Díez con el PSOE cuando se aseguró la pensión del Parlamento Europeo después de ocho años. Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-78424245531705144.post-45101851497438259222014-10-09T14:33:42.457+02:002014-10-09T14:33:42.457+02:00El problema es que el mismo que escribio lo anteri...El problema es que el mismo que escribio lo anterior, también escribió lo que sigue a continuación:<br /><br />"Todo apunta a que el problema es cómo hacer un partido que no pretenda ser ni partido-vanguardia al viejo estilo paleomarxista, ni partido de masas centralizado al estilo PSOE o PP, pero tampoco una creación de diseño para captar un mercado de votos disponibles. ¿Y por qué tiene que ser distinto, dirán ustedes? Porque un partido que aspira a recoger los votos de los críticos con el sistema de partidos, pues se propone cambiarlo, ni puede repetir los fallos habituales reproduciendo sus peores propensiones (selección negativa, por ejemplo), ni puede ignorar que recibirá apoyos de distinta orientación ideológica, algunos –o muchos- muy borrosos o eclécticos. Para sumar y existir, ese partido debería albergar sin excesivos crujidos a gente de simpatía liberal igualitaria, republicana (lean a Ovejero para entender de qué va ese “republicanismo”) y de la izquierda renovadora. Y por supuesto, ser un partido laico y antirelativista (me parece que por eso mismo deberá llevarse muy mal con el multiculturalismo). <br /> <br />La cuestión no es baladí. Quizás un partido así se parezca más a un partido anglosajón (británico o americano), con sus clubs, grupos organizados de influencia y corrientes reconocibles en liza abierta o subterránea –cosas que ponen muy nerviosos a los nostálgicos del leninismo o el jesuitismo-, que a un partido continental con sus militantes sometidos a una disciplina centralizada, celosamente administrada por una pirámide directiva profesional aplicada a eliminar las discrepancias. ¿Es posible algo así en la piel de toro? Bueno, la ventaja es que nadie lo ha intentado antes. Y, aunque a veces el desánimo y la indignación hacen que lo olvidemos, en España se han logrado estos años tantas cosas que parecían imposibles…" (CMG blog 29-05-207)<br />José Carlos Rodríguez Lorenzohttps://www.blogger.com/profile/14577333768381176642noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-78424245531705144.post-3755284988005557012014-10-09T14:21:29.365+02:002014-10-09T14:21:29.365+02:00Gorriarán cuando quiere es inextricable. Tras hace...Gorriarán cuando quiere es inextricable. Tras hacer el esfuerzo de entenderle, me resulta falaz y cínico, además de prepotente: trata de justificar que un partido político para ser útil a la democracia no debe ser democrático; nadie debe controlar a los que tienen el poder en el partido (se nota que él está a gusto en el poder desde que tomó el mando de Basta Ya en 1999, y después de Plataforma Pro) no debe haber poderes políticos separados. E introduce una falsa premisa (que serían proyectos políticos enfrentados dentro del partido) para impedir que dentro de UPyD haya diversidad de opiniones sobre el mismo proyecto. Qué cara.<br />Pedro Larraurihttps://www.blogger.com/profile/06511348435635012893noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-78424245531705144.post-63914930919607374002014-10-09T13:07:29.714+02:002014-10-09T13:07:29.714+02:00(El partido y la “democracia Interna”)
71. - Un p...(El partido y la “democracia Interna”)<br /><br />71. - Un partido político comprometido con la regeneración democrática debe pues adoptar aquel modelo de organización que, siendo fiel a sus exigencias y objetivos, sea siempre el más eficaz para la acción política emprendida. Por lo tanto, debe basarse tanto en principios firmes como en criterios pragmáticos. A diferencia de los partidos tradicionales conservadores, deberá emprender y adoptar formas de organización y trabajo político con objetivos claramente renovadores, congruentes con sus postulados y ofertas a la sociedad (por ejemplo, limitar los mandatos para corregir la tendencia de la política a convertirse en profesión, o establecer incompatibilidades que eviten la excesiva acumulación de poder). Y a diferencia de los partidoscomunidad, no pretende suplantar al sistema democrático existente anticipándolo en su estructura, sino mejorar, mediante la acción política en las instituciones, el sistema constitucional existente.José Carlos Rodríguez Lorenzohttps://www.blogger.com/profile/14577333768381176642noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-78424245531705144.post-16590935384766544782014-10-09T13:04:31.497+02:002014-10-09T13:04:31.497+02:00(El partido y la “democracia Interna” )
68. - El ...(El partido y la “democracia Interna” )<br /><br />68. - El partido político acorde con el modelo ilustrado de nación constitucional no puede pretender ser la semilla ni el núcleo experimental de una sociedad alternativa a la existente sino, por el contrario, una asociación de ciudadanos libres para la promoción de un proyecto político común congruente en una sociedad abierta y cambiante, constituida en nación. Esta asociación política de ciudadanos no pretende ser la vanguardia de la sociedad del futuro, ni la comunidad de elegidos que preserva y transmite la llama sagrada de la nación a las generaciones venideras. Sólo quiere ser un partido político con un proyecto propio que compita en igualdad de condiciones con otros partidos rivales para acceder a las instituciones mediante procesos electorales.<br /><br />69. - Siendo indudable que el partido debe hacer suyos algunos de los procedimientos que recomienda para la regeneración del sistema, también es cierto que la diferencia abismal que media entre un sistema constitucional completo, que estructura políticamente una sociedad compleja, y un partido que forma parte del sistema, obliga a renunciar a reproducir el sistema a una escala distinta. Por ejemplo, es absolutamente necesario que el sistema constitucional incorpore el principio de separación de poderes y de contrapesos institucionales, pero en cambio es absurdo que un partido se dote de poderes separados o incorpore en su seno un modelo de funcionamiento que partiera de la existencia de proyectos políticos enfrentados, al viejo y cainita modo de los “partidos dentro del partido”.<br /><br />70. - Algunas exigencias de “democracia interna” se derivan precisamente de esa confusión, de la falacia de que un partido político debe estructurarse a imagen y semejanza del sistema democrático porque es una sociedad dentro de la sociedad, o el visionario núcleo fundador de una pretendida sociedad del futuro. Un partido de ese tipo sería, en primer lugar, completamente inviable e ineficaz para su única justificación de existir, a saber, la acción política, que siempre es una acción pública sobre los asuntos públicos. La razón de esta incapacidad estriba en que al adoptar en su seno una imitación del sistema en su conjunto, toda su acción quedaría inexorablemente orientada a reproducir los debates y conflictos de intereses unidos a las luchas por el poder que en la democracia se ventilan entre partidos distintos. Un partido así sólo podría aspirar a “dar ejemplo”, a mostrarse como un experimento de cómo sería la democracia ideal si<br />el sistema imitara al partido modelo. En última instancia, un partido así necesita aspirar a ser el partido único o vanguardia guía, mientras los demás partidos aparecen como poco o nada democráticos y, por tanto, deslegitimados e inútiles para la empresa de instaurar esa supuesta democracia perfecta. En definitiva, ese partido ideal de tipo comunitario acaba desapareciendo o siendo finalmente un partido totalitario que no pretende ofrecer sus propuestas a la ciudadanía, sino obligarla a adoptar sus reglas, privándola de libertad, liquidando la igualdad y acabando con la ciudadanía y la democracia posible en nombre de la democracia perfecta. Es el proceso experimentado en el curso de numerosas revoluciones, en las que un partido revolucionario que se presenta como adalid de la libertad acaba liquidando ésta por completo.<br /><br /><br />José Carlos Rodríguez Lorenzohttps://www.blogger.com/profile/14577333768381176642noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-78424245531705144.post-14970810649843045622014-10-09T12:55:50.814+02:002014-10-09T12:55:50.814+02:001.7 El partido y la “democracia Interna”
65. - El...1.7 El partido y la “democracia Interna”<br /><br />65. - El funcionamiento interno de los partidos no es una cuestión privada: tiene relevancia pública porque modela y condiciona la vida política. Al fin y al cabo, son los partidos los que presentan candidatos, deciden las leyes y normas electorales, y tras las elecciones desempeñan las tareas de gobierno y oposición, de modo que sus decisiones de carácter interno tienen, inevitablemente, gran repercusión pública. Incluso pueden, como ocurre a menudo, alterar mediante pactos poselectorales la voluntad popular salida en las urnas. En conclusión, el funcionamiento de los partidos es parte fundamental del sistema democrático, no un asunto externo al mismo. Por eso mismo conviene adoptar un modelo organizativo lo más semejante posible a las normas que se proponen para el sistema democrático, pero con una importante salvedad: un partido político no es una democracia dentro de la democracia, ni un Estado dentro del Estado, sino un instrumento al servicio de la política que representa un proyecto particular, “de parte”, no “de totalidad” aunque se dirija al conjunto de los ciudadanos.<br /><br />66. - Ciertas corrientes de fundamentalismo político que también han tratado de colonizar a UPyD intentan reeditar la forma tradicional del partido de masas o partido-comunidad en nombre, precisamente, de la democracia interna. Pero la identificación de la democracia interna de un partido con el sistema democrático en su conjunto es una falacia capaz de frustrar ese proyecto de regeneración democrática que se pretende abanderar más que nadie. El concepto de partido-comunidad es congruente con la concepción típica de las religiones políticas (como los nacionalismo y las corrientes marxistas), en las que el partido aspira a sintetizar y anticipar los rasgos generales de la sociedad ideal que persiguen, a modo de un Estado nuevo, dentro del viejo Estado, que emergerá en su momento para sustituir al segundo en un salto revolucionario.Pero este concepto de partido-comunidad –alternativa a la sociedad existente- no sólo es inadecuado para la regeneración democrática que propugnamos, sino completamente antagónico con ella. Un partido propone una política para toda la sociedad en su conjunto, no para esa sección especial y limitada que es uno de los partidos políticos que existen en su seno.<br /><br />67. - En efecto, la regeneración de la democracia no consiste en la sustitución del sistema existente por uno completamente distinto de nueva planta –sea otra nación, como propugnan los separatistas, sea una sociedad radicalmente distinta-, sino en la adecuación progresiva y progresista, mediante reformas sucesivas, de las instituciones jurídicas y políticas de la democracia, de manera que estén más adaptadas a las cambiantes características de la sociedad española actual, y siempre con la vista puesta en el horizonte de una mayor libertad e igualdad. Ahora bien, mejorar la igualdad no significa, como pretendía el marxismo, estrangular cualquier forma de desigualdad económica, porque esa estrategia conduce inexorablemente a la extinción de la libertad. Del mismo modo, la creación de una nueva nación mediante la ruptura de la<br />nación española, como pretende el nacionalismo, siempre conlleva el coste injustificable de la destrucción del sistema democrático, y por tanto de la libertad e igualdad de los ciudadanos. Por el contrario, la regeneración democrática que concebimos pretende que la igualdad a mejorar sea la que consiste en igualdad jurídica, igualdad de oportunidades de acceso a los bienes materiales, e igualdad de disfrute de los servicios sociales básicos y de acceso a la educación y a la cultura. Nuestra convicción es que el desarrollo paulatino de esta concepción igualitaria conduce a una mejora de la libertad personal, al liberar progresivamente a los sujetos de sujeciones materiales y deficiencias educativas y culturales que les impiden en la práctica un mayor disfrute de su libertad jurídica.<br />José Carlos Rodríguez Lorenzohttps://www.blogger.com/profile/14577333768381176642noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-78424245531705144.post-31560600929861104242014-10-09T12:51:19.427+02:002014-10-09T12:51:19.427+02:00Plaza, tienes buena memoria. Aquí la cita completa...Plaza, tienes buena memoria. Aquí la cita completa<br /><br />I Congreso de UPyD<br />Ponencia Política.<br />Título I: Concepción del Partido y de la Regeneración Democrática<br />1.7 El partido y la “democracia Interna”<br /><br /><br />69. - Siendo indudable que el partido debe hacer suyos algunos de los procedimientos que recomienda para la regeneración del sistema, también es cierto que la diferencia abismal que media entre un sistema constitucional completo, que estructura políticamente una sociedad compleja, y un partido que forma parte del sistema, obliga a renunciar a reproducir el sistema a una escala distinta. Por ejemplo, es absolutamente necesario que el sistema constitucional incorpore el principio de separación de poderes y de contrapesos institucionales, pero en cambio es absurdo que un partido se dote de poderes separados o incorpore en su seno un modelo de funcionamiento que partiera de la existencia de proyectos políticos enfrentados, al viejo y cainita modo de los “partidos dentro del partido”.<br /><br />Copio en oto comentario todo lo relativo a este punto en el que “El Gorri” Como siempre comienza caricaturizando a sus adversarios: <br /><br />“Ciertas corrientes de fundamentalismo político que también han tratado de colonizar a UPyD intentan reeditar la forma tradicional del partido de masas o partido-comunidad en nombre, precisamente, de la democracia interna.”. (66). <br />José Carlos Rodríguez Lorenzohttps://www.blogger.com/profile/14577333768381176642noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-78424245531705144.post-69987040732790729992014-10-09T08:35:50.007+02:002014-10-09T08:35:50.007+02:00Voy a hacer un mini resumen aprovechando tu trabaj...Voy a hacer un mini resumen aprovechando tu trabajo. Le podemos llamar "robo". ;)<br /><br />Pero intentaré que sirva de aliciente para leer el original completo, aquí.<br /><br />Por cierto, en el primero congreso y su candidatura alternativa, ha sido el único momento en UPyD en el que se ha discutido -por lo bajini y de perfil- la democracia interna del partido. Un poco de risa, porque oficialmente nadie escuchaba los argumentos alternativos - que ocurrían el la plaza. Pero contestaban a los que les parecían más fuertes, sin decir a quién o a qué estaban contestando. Y sobre esta cuestión concreta de la separación de poderes, el mismo Gorriarán del artículo de ABC "La democracia en los partidos", escribió con dos cojones que la separación de poderes dentro de un partido es absurda. Literal: absurda. Porque sociedad y partido son muy diferentes, y en la sociedad hay intereses diferentes, mientras que en un partido no debe de haberlos. Acababa de inventar el partido totalitario, en su más geniuna expresión. No sé si podré encontrarlo. Estoy hablando de memoria, pero bastante seguro de lo que digo.plazaemehttp://plazamoyua.comnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-78424245531705144.post-52803323360832336922014-10-09T08:34:43.440+02:002014-10-09T08:34:43.440+02:00Voy a hacer un mini resumen aprovechando tu trabaj...Voy a hacer un mini resumen aprovechando tu trabajo. Le podemos llamar "robo". ;)<br /><br />Pero intentaré que sirva de aliciente para leer el original completo, aquí.<br /><br />Por cierto, en el primero congreso y su candidatura alternativa, ha sido el único momento en UPyD en el que se ha discutido -por lo bajini y de perfil- la democracia interna del partido. Un poco de risa, porque oficialmente nadie escuchaba los argumentos alternativos - que ocurrían el la plaza. Pero contestaban a los que les parecían más fuertes, sin decir a quién o a qué estaban contestando. Y sobre esta cuestión concreta de la separación de poderes, el mismo Gorriarán del artículo de ABC "La democracia en los partidos", escribió con dos cojones que la separación de poderes dentro de un partido es absurda. Literal: absurda. Porque sociedad y partido son muy diferentes, y en la sociedad hay intereses diferentes, mientras que en un partido no debe de haberlos. Acababa de inventar el partido totalitario en su más geniuna expresión. No sé si podré encontrarlo. Estoy hablando de memoria, pero bastante seguro de lo que digo. Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-78424245531705144.post-6139841369255053522014-10-09T00:29:46.444+02:002014-10-09T00:29:46.444+02:00Esa Oficina de UPyD debía expedientar también a su...Esa Oficina de UPyD debía expedientar también a su portavoz Rosa Díez, por llamar falso y pesetero a Paco Sosa.<br />Y al concejal de Madrid de UPyD Jaime de Berenguer, que fue de los que peor trataron a Sosa Wagner en la reunión del CP y le atribuye mentiras y malicia en su Blog.<br />Y al mismo Enrique Calvet, que ha criticado públicamente a UPyD en los mismos puntos en que lo hizo Sosa Wagner.<br />Y al filósofo Cofundador de UPyD FernandoSavater, que en el 2º Congreso del partido dijo que habría que superar el personalismo de Rosa Díez y pactar con ciudadanos...<br />Y la lista podría seguir...<br />O a todos, o a ninguno...<br />A todos.Anonymousnoreply@blogger.com