Los puntos limpios son instalaciones que permiten depositar residuos que necesitan una gestión específica por su tamaño voluminoso o por su composición, y favorecen tanto el reciclaje de estos residuos -electrodomésticos o muebles, incluso aceites, baterías, pinturas- como evitar la proliferación de vertidos incontrolados y el daño al medio ambiente.
En el verano de 2011 se abrió en la ciudad de Pontevedra el Punto Limpio de O Campiño. Eso confirió a Vigo la triste distinción de ser la única urbe gallega y española que no tiene ni un sólo punto limpio (Ver).
En Galicia hay cerca de 150 puntos limpios; más de la mitad (el 55%) los gestionan los Concellos, y el resto, empresas especializadas autorizadas por la Consellería de Medio Ambiente (Ver).
El Plan General de Urbanismo de Vigo aprobado en 2008, establece la creación de ocho Puntos Limpios: y es un documento de obligado cumplimiento. En el Pleno Municipal de abril de 2012 se aprobó por unanimidad una resolución para crear el primer punto limpio: pero una vez más el alcalde se burlo de los ciudadanos y de sus representantes y no hizo nada. Y hay que decir que la concesionaria de limpieza FCC se había comprometido a poner en marcha puntos limpios cuando ganó el concurso para ocuparse de la limpieza de Vigo el año 2001 (Ver).
En Vigo tan sólo tenemos un punto limpio precario y provisional: el "Punto de entrega de residuos de aparatos electrónicos y pequeños electrodomésticos", acondicionado en el Parque Central de Servicios del Ayuntamiento, en el barrio de Lavadores. Pero como advierten en la web municipal (VER), no es un punto limpio normal u homologado, pues no admiten frigoríficos (ni similares), ni materiales eléctricos.
Comparando Vigo con las 10 ciudades españolas de su tamaño (5 por encima y 5 por debajo en número de habitantes) y utilizando el buscador de puntos limpios de la Organización de Consumidores y Usuarios OCU en internet, obtendremos los siguientes resultados: - con cuatro puntos limpios: Bilbao y Valladolid; - con tres: Córdoba y Gijón; - con dos: Las Palmas, A Coruña y Vitoria; - con uno: Alicante, Hospitalet y Granada; - con uno pero provisional e incompleto (con restricciones de recogida): Vigo.
En fin: Abel Caballero sólo sabe mentir cuando se inventa que Vigo es la Ciudad más limpia de España. Y se gasta el dinero de todos los vigueses en campañas de autopromoción basadas en esa mentira. Y se lo gasta también en escobas de platino que otorga una empresa de márketing promovida por FCC, y en viajes a Madrid a recogerlas...
Resulta despreciable un gobernante se preocupe más de la publicidad, de decir que ha hecho y hace, que de hacer; y en este caso se añaden las mentiras. ¿Qué diríamos de un padre de familia que en vez de comprar comida para sus hijos se gasta el dinero en un diploma que le confiere el título de mejor cocinero de España, y se dedica a presumir de ello, mientras el resto de la familia pasa hambre?
Desgraciadamente un grupo de vigueses que votan engañados (dan pena) o que apoyan el caciquismo y la corrupción (dan asco) mantiene a Abel caballero en el puesto, con la vergonzosa colaboración del BNG y del PP que aunque lo nieguen le han permitido hacer todo lo que ha querido.
Si le preguntamos al cacique por los puntos limpios de Vigo nos dirá: "nada que declarar", como hace habitualmente. Asco de políticos cobardes, inútiles y corruptos.
Estoy seguro de que algún día tendremos puntos limpios, y además acabaremos con toda esa bazofia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario