Más de medio millón de venezolanos vive fuera de su País (en
EEUU, en el censo de 2010, eran 215.000; en España son más de 160.000; y en
Colombia se calculan que más de 200.000): pero en las pasadas elecciones presidenciales
celebradas hace 5 meses los venezolanos habilitados para ejercer el derecho de
voto en sus Consulados en más de 80 Países por todo el mundo sólo eran 100.495.
Sus representantes denunciaron que el gobierno de Hugo Chávez les puso muchas trabas para permitirles votar, (cerró el Consulado de Miami obligando a 15.000 votantes a viaja a New Orleans para poder votar) pues saben que no son adictos a la Dictadura. Es
indicativo el dato de que desde las elecciones del 1998 (cuando Chávez llegó al
poder) el electorado en el exterior creció un 863%: miles de venezolanos que
huyeron del régimen dictatorial y de la anarquía reinante en Venezuela. El País caribeño siempre ha estado muy vinculado con España, y son
miles los gallegos y otros españoles (140.000 en 10 años) que retornaron a
España por las pésimas condiciones y expectativas de vida, y sobre todo por la inseguridad
(unas 21.700 personas asesinadas en Venezuela en 2012, según datos de la ONG Observatorio Venezolano de Violencia).
El rechazo a Chávez que da título a este artículo se
demuestra con números: el 7 de octubre pasado, el 91,6% de los venezolanos en
el exterior votaron a favor de Henrique Capriles (61.432 votos), y sólo el 6,8%
a favor de Hugo Chávez (4.570), según datos facilitados por los voluntarios del movimiento Comando Exterior Venezuela, basados en las Actas electorales de los
Consulados Venezolanos de todo el Mundo. Los datos publicados del Consulado de Vigo fueron muy claros: 1.063 a favor de Capriles y 44 votos a favor de Chávez. El Gobierno de Venezuela ocultó todos esos
datos; pero de alguna manera reconoció que eran ciertos al no hacer ninguna
refutación.
En el cómputo total, y eso fue de lo único que hablaron los
medios venezolanos, Capriles obtuvo un 45% de los votos, y Chavez ganó con el
54%. Sus seguidores celebraron que sería Presidente hasta el año 2019. Pero el
Comandante Chávez no había sido muy noble con ellos al ocultarles que su cáncer
se estaba extendiendo y que le quedaba poco tiempo de vida. Ayer todo terminó
para él. Descanse en paz. Y vuela la paz a Venezuela.
Hace tiempo publiqué una fábula, titulada "Dictadura
basada en la Democracia", que rescato de la hemeroteca (Faro de Vigo, 2007):
En una isla desierta vivían once personas. Gobernaba desde
hacía tiempo un líder elegido y mantenido por sufragio universal. Las cinco
personas más trabajadoras y responsables de la isla le consideraban un
dictador. Pero los otros cinco, que eran bastante vagos, vividores y
vagabundos, le votaban siempre. Así, el resultado de las elecciones siempre era
de 6 votos a favor del líder frente a 5 en contra. Y el líder dictaba leyes por
las que la mitad de lo que producían los trabajadores, a los que llamaba "la
oposición anti-revolucionaria", les era confiscado y se le daba al pueblo
llano, a sus votantes, que agradecidos, vivían sin trabajar y seguían votando
al líder, el cual les animaba vehementemente a votarle para no perder “los
logros sociales” que él les había conseguido (como continuamente en la Tele les
recordaba).
No se hace referencia en esa paradójica fábula a que la isla
era rica antes de la llegada del dictador, pero ahora la violencia campea por doquier, la sanidad pública es un desastre, la pobreza aumenta y curiosamente las inversiones en gastos militares también aumentan; tampoco cabe la acusación de nepotismo
(Chávez ha colocado en la Administración a casi toda su familia, su madre llegó
a gobernadora de Barinas, y su hermano Adán, a ministro); tampoco se menciona el
férreo control que ejerce el déspota de la isla sobre la información, decretando el cierre de cualquier medio de comunicación que le critique (¿cómo se
puede calificar de democrático a un Estado que no permite la libertad de
expresión?); y se entiende que alguno de los trabajadores (de los 5 de la fábula)
se hartara y se fuera a otro País, esperando que llegara el momento oportuno
para poder regresar.
Le vuelvo a dedicar esa historia a una parte del sufrido
pueblo venezolano, que lamenta y denuncia su sufrimiento y las muchas desgracias que les ha causado el chavismo, manteniendo al mundo engañado con propaganda llena de falsedades; con mis mejores deseos de que la transición a una verdadera
democracia se lleve a cabo sin que los vagos, vividores, vagabundos y aduladores
del Dictador sigan pisoteando los derechos civiles y la libertades en ese País
hermano.
Y está claro que en Cuba falta poco para que contemplemos una
situación muy similar. Me alegro mucho.
Fe de errores: por error, puse un porcentaje de votos a Chavez del 3,9%, que realmente es el que corresponde a España, y ya lo he corregido, pues el dato real es del 6,8% en todos los Consulados registrados. Sorry a lot.
ResponderEliminarChávez se negó a abrir un centro de votación alternativo en Miami (donde había cerrado el Consulado), obligando a la mayor colonia de venezolanos fuera de Venezuela (más de 20.000 censados) a viajar 15 horas en autobús hasta Nueva Orleans para poder votar.
ResponderEliminarQuien diga que Chávez respeta la democracia es un chavista fanatizado.
El resultado del Consulado de NewOrleans fue 8.449 votos para Capriles y 51 votos para Chávez: 99,2% de los venezolanos en EEUU rechazaron a Hugo Chávez.
nazismo,franquismo,stalinismo,maoismo,chavismo, el mundo no ha cambiado nada,menos mal que al final se impone siempre el secillo y simple sentido común
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