(Versión definitiva).
He tenido la ocurrencia de proponer a los Diputados de nuestro partido que valoren la conveniencia de promover la celebración de un Referéndum sobre la Ley de Reforma Laboral del PP.
Al final he llegado a la conclusión de que no es una buena idea.
He tenido la ocurrencia de proponer a los Diputados de nuestro partido que valoren la conveniencia de promover la celebración de un Referéndum sobre la Ley de Reforma Laboral del PP.
Al final he llegado a la conclusión de que no es una buena idea.
Podría parecer que el PP tiene legitimidad para imponer esa Reforma al haber obtenido en las elecciones del 20N mayoría parlamentaria. Pero en el programa electoral que presentaron cuando pedían el voto a los españoles no incluían muchas de las medidas que ahora han decretado. Rajoy prometió que no abarataría el despido, pero lo ha hecho: abaratarlo y facilitarlo. También dijeron los dirigentes del PP que esa reforma se haría por consenso, que crearía empleo inmediatamente y que no se aprobarían por Decreto Ley (como se ha hecho). Por lo tanto, el PP y Rajoy han perdido su legitimidad al haber engañado a los ciudadanos. El malestar y la reacción social surgida contra la citada Ley del PP incluye esa sensación de que nuestros políticos se siguen burlando de los ciudadanos, incluso de sus propios votantes, haciendo lo contrario de lo expuesto en el programa y en su campaña electoral.
Unión Progreso y Democracia se ha manifestado en contra de esa Reforma Laboral en su conjunto, considerando entre otras cosas que se ha hecho de espaldas a los trabajadores, y que está llamada a ser un fracaso.
No pensamos sin embargo que la huelga general convocada por los sindicatos vaya a solucionar nada, y por eso no la respaldamos como partido, aunque respetamos tanto a los que defienden la huelga como a los que no la apoyan.
No pensamos sin embargo que la huelga general convocada por los sindicatos vaya a solucionar nada, y por eso no la respaldamos como partido, aunque respetamos tanto a los que defienden la huelga como a los que no la apoyan.
Podríamos considerar la opción de poner en marcha una medida extraordinaria, contemplada en nuestra Constitución, como es un Referéndum legal, donde se votara SI o NO a la Ley de Reforma Laboral.
Estamos seguros de que ganaría el NO y la reforma quedaría deslegitimizada, pero ese Referéndum nunca se llegaría a celebrar, porque el PP lo pararía, a pesar de que se superara el medio millón de firmas pidiéndolo, ya que el partido de Rajoy tiene poder y capacidad legal para vetarlo en el Cogreso.
Pero además, si se hiciera el referéndum y ganara el NO, los sindicatos interpretarían que no se puede proponer ninguna reforma laboral. Y UPyD tiene un proyecto de reforma laboral que consideramos necesario, cuya pieza fundamental es el contrato único indefinido.
No todas las ideas son perfectas (como ésta del Referéndum); pero si no quisiéramos equivocarnos nunca no haríamos nada.
Pero además, si se hiciera el referéndum y ganara el NO, los sindicatos interpretarían que no se puede proponer ninguna reforma laboral. Y UPyD tiene un proyecto de reforma laboral que consideramos necesario, cuya pieza fundamental es el contrato único indefinido.
No todas las ideas son perfectas (como ésta del Referéndum); pero si no quisiéramos equivocarnos nunca no haríamos nada.
Totalmente de acuerdo.
ResponderEliminarEn el programa de UPyD se dice: La democracia del siglo XXI debe ser la democracia de los ciudadanos. Proponemos que, con medio millón de firmas, pueda proponerse una iniciativa legislativa popular, y someterse a referéndum ciudadano las decisiones importantes.
¡A recoger firmas!
En un referendum sobre la reforma laboral ganaría el No.
ResponderEliminarEn un referendum sobre si los ciudadanos consideran que los sindicatos deben seguir aprovechándose del sistema, cobrando dinero público y gestionando (a su manera) la formación, etc., solo votarían a favor de los sindicatos los sindicalistas y los que se benefician corruptamente de sus ventajas y privilegios.
Me gusta más el referéndum que propone el segundo anónimo. En cuanto al referéndum sobre la reforma laboral, como expones, es bastante peliagudo. Deslegitimaría casi por completo al Gobierno o al Congreso a promulgar cualquier reforma posterior. Para ello es necesario, todavía, una buena formación ciudadana. Conocer nuestros derechos, conocer nuestros deberes, conocer los límites de nuestros derechos, interiorizarlos, y entonces, hacer uso de ellos. Queda mucha democracia que enseñar y mucho que predicar, pero todavía somos jóvenes, sólo 4 añitos ;)
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