martes, 6 de septiembre de 2016

Algo huele a podrido en Ciudadanos: las polémicas sobre sus primarias en Galicia y País Vasco demuestran la corrupción política y la falta de democracia interna del partido de Albert Rivera.

El dedo de ARse ha impuesto
una vez más en C'iudadanos.
   Galicia.
   El 25 de septiembre se celebran elecciones Galicia. Los jefes de Ciudadanos negociaron con la periodista viguesa Cristina Losada, y le ofrecieron que fuera su candidata a la presidencia de la Xunta, como independiente. Según se ha publicado, Manuel García Bofill, presidente del consejo general del partido naranja, afirmó que Losada era una apuesta personal del presidente de la formación, Albert Rivera. (Ver).
   Otros afiliados gallegos (Juan Ferreiro y Bruno Caló) quisieron presentarse a ese proceso de primarias, pero el partido aseguró que necesitaban 93 avales, el 10% de los afiliados gallegos. Nadie se cree que Ciudadanos tenga 930 afiliados en Galicia (sobre todo después del escándalo de la destitución del candidato elegido en primarias para La Coruña: Ver), pero al no ser públicos esos datos pueden mentir e inventarse la cifra de afiliados que quieran.
   Los dirigentes de C´s se encargaron de conseguir los avales para su candidata Cristina Losada; y los otros dos aspirantes no pudieron hacerlo en el tiempo que les dieron (48 horas). Al final, no hubo votación de primarias y Cristina Losada fue entronizada con la bendición del poder absolutista y colocada de cabeza de lista por A Coruña.
   Los afiliados denunciaron que la candidata oficialista ganó con ayuda del aparato del partido, como lo refleja en titulares ABC:

   Esos afiliados denunciaron la falta de igualdad de oportunidades, violando el reglamento de primarias. También exigieron una revisión del censo y una auditoría del sistema de votaciones:
Hervías anunció a los medios que la candidata de Ciudadanos por Galicia
sería Cristina Losada, cuando había dos candidatos más. (Ver ref. noticia).
   También en el País Vasco.
   Las primarias del partido de Albert Rivera en el País Vasco, donde también se celebran elecciones el 25S, no estuvieron exentas de sospechas de pucherazo. Y quienes lo denunciaron no fueron los enemigos de Ciudadanos de otros partidos (PP, Socialistas, Podemos, nacionalistas...), sino los propios afiliados de C´s del País Vasco. Y en concreto, manifestaron que la dirección del partido dio de alta de manera irregular a 50 nuevos afiliados (fantasmas?) para poder ganar sin problemas ese proceso de primarias en el que se eligió al candidato para las elecciones autonómicas del mes que viene.
   Pongo a continuación una imagen de la noticia que daba El Mundo sobre ese proceso de primarias, y subrayo las siguientes frases: un proceso que no está exento de polémica, un grupo de militantes ha denunciado maniobras del sector oficialista, encabezado por el candidato, para mantener el control del partido; denuncian un abultado número de altas en el censo del partido coincidiendo con las primarias, de pronto han aparecido 50 nuevas afiliaciones, denuncian...
Texto de la noticia publicada por El Mundo (Ref).
   Al final, lógicamente, ganó el candidato oficialista, Nicolás de Miguel. Y no digo que no fuera el mejor: no tengo datos para opinar sobre eso; pero sí digo que es muy chocante que un partido que presume de democracia interna y de elegir a sus candidatos en procesos de primarias (y que incluso exige a los demás partidos que hagan lo mismo) no debería salir continuamente en los medios de comunicación acusado por sus propios afiliados de cometer irregularidades y pucherazos en sus procesos electorales internos. Y ejemplos hay a montones: Ver en general, Ver en Murcia, Ver en AragónVer en Málaga, Ver en Extremadura, Ver en León...
   El secretario de organización de Ciudadanos, Fran Hervías, considerado por muchos como el máximo mafioso de la organización, lo niega todo. Es lo que cabía esperar: lo raro sería que reconociera que hacen trampas habitualmente. Pero sabemos que las hacen.
 (Ref).

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