sábado, 24 de diciembre de 2016

Responsables del terrorismo islamista: las diferencias entre "los muertos de Aznar" y los de Merkel.

   Con motivo del reciente atentado perpetrado por un joven islamista radical en un mercado navideño de Berlín, algunos políticos y medios alemanes han acusado a Ángela Merkel de ser la responsable del atentado, y han hablado de "los muertos de Merkel".
   He leído varios artículos que meten en el mismo saco el caso del ex presidente de Gobierno de España, José María Aznar, acusado de ser responsable de los atentados de los trenes de Madrid el 11 de marzo de 2004, y la actual Canciller de Alemania, y que defienden que no tienen ninguna responsabilidad. La periodista y líder de ciudadanos en Galicia afirma que "los únicos culpables de un atentado terrorista son sus autores".
   Yo creo que ambos casos son completamente diferentes: que Aznar fue -y es- culpable, y que en cambio Merkel es inocente.
   Aznar decidió unilateralmente (teniendo en contra a la gran mayoría de españoles) apoyar a Bush y a Blair para comenzar la invasión militar de Irak. Esa guerra, que comenzó en marzo de 2003 y duró oficialmente ocho años y medio, fue una guerra muy injusta: se emprendió sin el apoyo de la ONU y se basó en datos falsos (como que Sadam Hussein tenía armas de destrucción masiva y que era el responsable de los atentados de las torres gemelas). La guerra de Irak causó la muerte de cientos de miles de personas (la mayoría civiles), forzó al exilio a otros tantos, y arruinó el país, empeorando además todos los conflictos de esa zona y aumentando la inseguridad mundial.
   Resulta razonable pensar que los agredidos en esa guerra, los que perdieron a su familia, los que lo perdieron todo, y sus aliados (como lo era Bin Laden), consideren justo atacar y causar daño, como venganza o represalia, a los responsables de sus desgracias o a sus respectivos países. Eso es lo que pasó: la historia nos enseña que la violencia genera más violencia en un crescendo difícil de parar.
Ref
   Los atentados del 11 de septiembre de 2001 que causaron en EUA cerca de 3.000 muertos y 6.000 heridos) fueron una represalia o venganza de al-Qaeda contra EUA por establecer bases militares en Arabia y por los bombardeos masivos que ordenó Clinton en 1998 sobre Afganistán (probablemente realizado para distraer la atención por sus escandalosas relaciones con una becaria). Los atentados de los trenes de Madrid (cerca de 200 muertos y 2.000 heridos) tuvo como causa desencadenante la imprudencia de Aznar y su estúpida foto en las Azores con Bush y Blair, lo que provocó que Al Quaeda pusiera en el punto de mira a España. Los atentados de Londres del 7 de julio de 2005 (que causaron 56 muertos y 700 heridos) no se hubieran cometido si Reino Unido no hubiera apoyado a EUA en la guerra de Irak... En EUA, en España y en Reino Unido se alzaron muchas voces culpando a los dirigentes políticos citados de ser los responsables de esos atentados.
   En cambio los atentados de Paris de noviembre de 2015, en el teatro Bataclán y en otro sitios, que causaron 137 muertos y 415  heridos, no se pueden equiparar a los anteriores: Francia había decidido bombardear Ikak y Sitria para neutralizar el avance y la barbarie del llamado estado islámico, responsable de diversos atentados (como los del Charlie Hebdó) y esos ataques se realizaron con el visto bueno de los gobiernos legítimos de esos países. Lo que hizo Francia fue correcto, y los atentados que sufrieron (en Paris y en Niza, este último que costó 80 muertos) son venganzas terroristas que se pueden considerar ocasionadas por una guerra justa. Por eso en Francia nadie acusó al gobierno de ser responsables o causantes de los atentados.
Alemania ha recibido estos dos últimos años
a más de 1.200.000 refugiados.
   El caso de Ángela Merkel también es distinto a los anteriores. Alemania no ha atacado a Irak ni a Siria ni a Afganistán ni a Turkía... La principal acusación de los detractores de la Canciller, por lo que le culpan de los atentados sufridos, es que ha abierto demasiado las puertas a los refugiados de esos países, que los está tratando demasiado bien... El año 2015 Alemania acogió a un millón de refugiados, y de enero a agosto de 2016 a 150.000 más. Merkel ha tomado esa decisión a pesar del alto coste en popularidad: muchos alemanes se oponen al gasto (se calcula en 2.000 € por refugiado y mes) y sobre todo al temor de que los acogidos no se integren y ocasionen problemas e inseguridad.
   Yo opino que los refugiados en Alemania deben mucho agradecimiento a Ángela Merkel, y cualquier musulmán que cometa un atentado en ese país está causando un daño gravísimo a los propios refugiados y musulmanes. Me temo que los terroristas que están llevando a cabo esos actos deben ser radicales del Estado Islámico, que quieren boicotear los intentos de resolver el grave problema europeo de los emigrantes, porque cuanto peor lo pasen los musulmanes de esos Países más se radicalizarán y fanatizarán, lo que conviene a sus intereses. Ya lo dice el principio latino ¿Cui prodest? A quien beneficie ese atentado probablemente sea el causante
   Por eso Merkel no es responsable de los atentados terroristas que se están cometiendo en Alemania, aunque los partidos de extrema derecha aprovechen estos atentados para denigrarla y para atraer a la opinión pública, a las masas manipulables, hacia sus posturas xenófobas, que además de inhumanas no contribuirán nunca a la seguridad ni a la paz mundial, sino a todo lo contrario. Sin entrar a juzgar sus políticas económicas, felicito a Merkel por lo que está haciendo con los refugiados, aunque tenga efectos secundarios tan dramáticos como los que hemos vivido hasta ahora.
Yihadistas con el Corán. Matan en nombre de Allah.
   En cambio José María Aznar para mí es un asesino, y todos los del PP (salvo los que se hayan opuesto y lo hayan condenado) son cómplices: tienen las manos manchadas de la sangre de 200 muertos y 2.000 heridos de los atentados de Madrid del 11M. Y Aznar es corresponsable del aumento de la violencia y la inseguridad del mundo. Para defender a Aznar hay que mentir, como acaba de hacer la citada escritora Isabel San Sebastián en su artículo de ABC en el que llama carroñeros a los que acusan a Merkel ya Aznar: la escritora y periodista dice que el ex presidente español "actuó con arreglo a los cánones democráticos que rigen en el Occidente cristiano": nadie en su sano juicio, salvo un fanático del PP, puede aceptar como cierta esa proposición.
   Son muchos los factores que están aumentando esa inseguridad mundial: intereses económicos, los imperialismos americano y ruso, la soberbia del estado de Israel... Pero quizá el principal factor es la religión musulmana. Yo propongo como solución (entre otras como pacificar y recomponer Siria, Irak, Palestina y otros países) que convenzamos u obliguemos a todas las autoridades religiosas del islam para que declaren la guerra santa contra los yihadistas, contra los fanáticos del Corán, contra los miembros del ISIS  ("estado islámico", que por cierto nació en Irak), decretando que Allah no acogerá en su seno a quien mate a persona inocentes, y mucho más de un País cuyo gobierno te está ayudando.
   ¿Acaso alguien duda que las decisiones políticas que tomó el emperador del Japón a mediados del siglo XX, cuando decidió atacar a Estados Unidos e invadir Filipinas y otros países del Pacífico, no fue la causa original de que murieran millones de japoneses, incluidas las víctimas de las bombas atómicas de Hiroshima y Nagasaki?

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