La afiliada a quien la dirección de UPyD quiso impedir que fuera Coordinadora en Murcia, demanda al Partido.

   El pasado 22 de febrero los afiliados de UPyD de la Región de Murcia eligieron a Encarna Hernández como Coordinadora Territorial del partido en esa Comunidad. Encarna se impuso por 102 votos a 79 al otro candidato, Rafael Sánchez. En la jornada electoral, al acabar el recuento, Rafael Sánchez reconoció su derrota, y como prueba de ello se acercó a Encarnación Hernández, le felicitó y le dio un beso (Vídeo 1:25). Pero unos días después la Dirección nacional de UPyD, tras recibir un recurso de amparo presentado por Rafael Sánchez, decidió anular esa elección (Ver), considerando motivo para ello que algunos afiliados había vertido en los días previos a la votación algunas críticas y acusaciones contra el candidato que había perdido, lo que, según UPyD “había impedido que se dieran las necesarias garantías de igualdad e imparcialidad en el proceso electoral” (Ver artículo con referencias).
   Encarna Hernández mostró su sorpresa y protestó, presentando un recurso a la Comisión Electoral de UPyD pidiendo la rectificación de la decisión que habían tomado, afirmando que no se había hecho ningún comentario injurioso por parte de miembros de su candidatura, y que no podían ser responsables de todo lo que apareciera en las redes sociales (Ver). El recurso no fue tenido en cuenta.

Tras el recuento Rafael S. felicitó por su victoria a
Encarna H. Al día siguiente recurrió las elecciones
pidiendo ayuda a sus amigos de Madrid.

   Muchos no tenemos ninguna duda de que el verdadero motivo que llevó a UPyD a tomar esa ridícula e inaceptable decisión fue que Rosa Díez y otros miembros del Consejo de Dirección de UPyD querían que ganara Rafael Sánchez, que era el candidato “oficialista”, apoyado especialmente en Madrid por su amigo el también murciano Manuel Hernández, miembro del Consejo de Dirección y responsable de Educación de UPyD (que había sido el anterior coordinador en Murcia y que cuando en 2009 se fue a Madrid para trabajar en la dirección del partido dejó a Rafael Sánchez en el cargo: Ver).

   Los que conocemos bien UPyD estamos al tanto de todos los abusos e ilegalidades que en estos cerca de 7 años de vida ha cometido el aparato de UPyD para controlar férreamente al partido y conseguir imponer a sus candidatos. Muchos lectores y la gente poco o mal informada creerán que eso no puede ser posible dentro de UPyD, pero lo pueden comprobar muy fácilmente: este Blog da buena cuenta de la mayoría de las corrupciones internas de UPyD, que Rosa Díez y sus fans quieren seguir manteniendo ocultas… (Ver informe sobre la corrupción interna en UPyD).

   Y en Murcia cometieron el error de creerse por encima de todo y con derecho a todo y se pasaron tres pueblos: se creyeron que iban a poder seguir haciendo lo que quisieran, ejerciendo un despotismo de guante blanco (y de casta) que muchos hemos sufrido; y como siempre, esperaban que los afiliados víctimas de sus abusos se cabrearan y se marcharan del partido… Pero se han debido llevar un grandísimo chasco, pues Encarna Hernández y los otros afiliados que componían su candidatura al Consejo Territorial han presentado una demanda civil contra su propio partido por vulneración de derechos fundamentales, en la que reclaman que restablezca la validez de las elecciones de febrero y se proclame como ganadora la candidatura que resultó elegida. En la demanda, que fue presentada este jueves día 3 de julio en los juzgados de primera instancia de Murcia, se solicita además, como medidas cautelares, que se suspenda y se deje sin efecto cualquier nuevo proceso electoral al Consejo Territorial de UPyD de la Región de Murcia (Ver noticia sobre la denuncia).

   ¡Muy bien Encarna Hernández y todos los demás que luchan con ella! ¡Mucho ánimo! Recibid mi solidaridad, mi reconocimiento y mi felicitación por vuestra lucha por la justicia y la democracia, por no dejaros pisotear por Rosa Díez y por su guardia pretoriana. Estoy seguro de que ganaréis la demanda. Quizá sea el comienzo de la regeneración de toda la podredumbre que hay dentro de UPyD, que cuando alguien la descubre (como me pasó a mi) le causa perplejidad, incredulidad, decepción y profundo cabreo…